Aceites Candón
Biocandón, nuestro aceite ecológico

Biocandón, nuestro aceite ecológico

Ya tenemos disponible en la tienda online nuestro aceite de oliva ecológico Biocandón, un zumo de aceituna de sabor dulce y equilibrado, aroma afrutado de intensidad media con tonos de frutos secos. Un aceite de oliva virgen extra de categoría superior obtenido directamente de aceitunas y sólo mediante procedimientos mecánicos de la campaña 2020/21. 

Seguramente hayas oído hablar de este tipo de aceite pero desconozcas sus beneficios o las diferencias con el aceite de oliva tradicional, así que no te pierdas este post porque te contamos todo lo que necesitas saber sobre el aceite ecológico.

Como habrás observado, últimamente está muy de moda el consumo de productos ecológicos, cuya compra está motivada por los beneficios que obtendremos, como:

  • Salud y seguridad alimentaria (percepción de más saludables y nutritivos).
  • Producto de alta calidad, naturalidad, frescura, sabor.
  • Rechazo al uso de pesticidas, fertilizantes de síntesis, hormonas, aditivos, etc.
  • Percepción de una producción respetuosa con el medio ambiente y el bienestar animal.
  • Percepción de mayor proximidad al campo, con origen conocido, auténtico, autóctono, tradicional.
  • Percepción de una caracterización del producto coherente con una determinada cultura o filosofía de vida.

Diferencias entre el aceite de oliva ecológico y convencional

Podemos decir que en España el cultivo del olivar ocupa casi el 40% del total de la superficie de agricultura ecológica permanente (olivares, viñedos, frutales, etc.), siendo Andalucía la región con más superficie ecológica cultivad

En nuestra comunidad, de los 1,5 millones de hectáreas de olivar, solo el 5% se destina al cultivo ecológico, unos 80.000 en total.  A grandes rasgos, la única diferencia entre un olivar ecológico y uno convencional es la forma de cultivo. Así, en un olivar convencional se pueden utilizar ciertos productos químicos permitidos para aumentar su productividad y luchar contra plagas y enfermedades, mientras que en un olivar de cultivo ecológico, este tipo de productos químicos están prohibidos. En su lugar, sólo se permite el uso de productos orgánicos (no sintéticos), ya sean como fertilizante (para nutrir la planta), como fungicida (para evitar enfermedades) o como plaguicida (para combatir plagas).

El resultado de todo ello es la disminución de la cantidad de aceitunas por árbol y el aumento de los costes de laboreo y producción, que también repercuten en el precio del aceite, entorno al 25% o más, comparado con un aceite de oliva virgen extra de una calidad similar.

En cuanto al sabor, no hay diferencias de sabor y calidad entre un aceite ecológico y uno convencional, ya que los factores que más influyen son la climatología, el entorno, el tipo de cultivo (secano vs regadío), la variedad y el estado de madurez de las aceitunas o el proceso de extracción, determinan su calidad, sabor y propiedades saludables, independientemente de que el cultivo sea ecológico o convencional. Por ello,>el hecho de ser ecológico no es una garantía de que el aceite esté más bueno o sea mejor.

Beneficios del aceite de oliva ecológico

Llegados a este punto nos preguntamos ¿qué es lo que hace especial al aceite ecológico?, ¿cuáles son sus beneficios? El aceite de oliva ecológico se elabora a través de un proceso de extracción en frío combinado con técnicas que lo liberan del uso de productos químicos en su composición. Por ello, hablamos de un aceite 100% orgánico, beneficioso para la salud y más respetuoso con el medio ambiente.

Y es que, el aceite ecológico está libre de pesticidas u otros productos químicos, por lo que nos librarnos de estos agentes tóxicos que pueden llegar a ser dañinos para nuestro organismo. 

Para asegurarnos de que estamos consumiendo aceite ecológico, debemos buscar la etiqueta  CAAE. En España, para que un producto se pueda vender como “ecológico, bío u orgánico”, tiene que pasar por un control y certificación oficial, que acredita que los productos provienen de la agricultura ecológica. Estas competencias están transferidas a las comunidades autónomas, que mediante los correspondientes organismos de control, definen el conjunto de estándares de producción tanto en cultivo, almacenaje, procesamiento, empaquetado y distribución, tales como:

  • No se pueden utilizar organismos genéticamente modificados y elementos químicos de síntesis, tales como fertilizantes, pesticidas, antibióticos o aditivos.
  • No se puede cultivar sobre suelos que hayan estado expuestos a estos agentes durante al menos los últimos 3 años.
  • No se pueden compartir espacios físicos con productos convencionales durante el cultivo, almacenaje, procesamiento y empaquetado.
  • Deben realizarse inspecciones periódicas in-situ.

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